El amor cuida la vida
El pasado lunes 25 de marzo la Iglesia celebró la Solemnidad de la Anunciación del Señor con la Jornada Provida.
Nuestra parroquia, para celebrar esta jornada, invitó a las madres embarazadas de la comunidad a la eucaristía de las 20 de la tarde, para que recibieran la bendición para ellas y sus hijos.
Este es el mensaje que el papa Francisco nos ha enviado para esta jornada:
En la Anunciación lo primero que hace el ángel es evocar la memoria, abriendo así el presente de María a toda la historia de la salvación. Evoca la promesa hecha a David como fruto de la alianza con Jacob. María es la hija dela alianza. También hoy, nosotros, estamos invitados a recordar, a mirar a nuestro pasado para no olvidar de donde venimos. La memoria permite a María apropiarse su pertenencia al pueblo de Dios. ¡Nos hace bien recordar que somos miembros del pueblo de Dios! “Nada es imposible para Dios”: así termina la respuesta del ángel a María. Cuando creemos que todo depende exclusivamente de nosotros permanecemos prisioneros de nuestras capacidades, de nuestras fuerzas, de nuestros horizontes miopes. Cuando, en cambio, estamos dispuestos a dejar que nos ayuden, a dejar que nos aconsejen, cuando nos abrimos a la gracia, parece que lo imposible empieza a hacerse realidad. (25-03-2017)
En nuestra parroquia, para celebrar la Encarnación y dar gracias a Dios por su amor hacia nosotros, y dar gracias por la vida, en la Eucaristía de la tarde invitamos a las madres y padres que esperan un hijo/hija para dar gracias por la vida, para manifestar “el gozo por una vida que nace, el respeto y la defensa de toda existencia humana”.
La vida es un don de Dios que debemos acoger, custodiar y promover. La vida es siempre un bien.