Publicado el 17 julio 2022 | por Comunidad
Campamento de Juniors, «Avengéber»
Ahora que hemos podido descansar, cocineros, intendente, los casi 40 educadores y, por supuesto, los 182 niños que hemos compartido esta experiencia, podemos hablar de todo lo realizado durante estos diez días juntos.
Desde el 4 hasta el 13 de julio hemos aprendido acerca de los dones del Espíritu Santo. Cada día recibíamos un don y entendíamos la grandeza del amor de Dios hacia nosotros por poder regalarnos dicho dones. Nos llevamos a casa la sabiduría, el entendimiento, el consejo, la piedad, la fortaleza, la ciencia y el temor de Dios para poder enseñarlo en todos nuestros ambientes y, al igual que el objetivo del último día, ser pescadores de hombres.
La convivencia nos ha hecho ser mucho más pacientes, humildes y generosos con nuestros hermanos.
Creo que los niños se llevan a casa una bonita experiencia que espero que recuerden con mucho cariño y un aprendizaje que puedan aplicarlo día a día para poder seguir el camino que Él nos marca.
Los educadores estamos felices y con las pilas cargadas para el curso que viene.
Gracias a todos los que han confiado en nosotros, en especial a los padres, por dejar en manos de este equipo a sus hijos y gracias de corazón a todos los que habéis hecho posible este campamento.
Por la sonrisa de un niño ¡Siempre unidos!
Un educador