Publicado el 26 julio 2022 | por Comunidad
Misión en Honduras
Un grupo de jóvenes de nuestra parroquia participan este verano en una experiencia misionera en Honduras. En concreto, a lo largo del mes de agosto colaborarán en la capital de este país de Centroamérica, Tegucigalpa, en algunos de los muchos proyectos de la asociación ACOES, fundada por el sacerdote andaluz Patricio Larrosa y centrada especialmente en el acceso y el derecho a la educación como base para la construcción de un proyecto de vida.
A lo largo del curso han tenido encuentros y reuniones de todo tipo como preparación para la experiencia misionera y también para recaudar dinero y poder colaborar económicamente con el proyecto.
Honduras es uno de los siete países que forman Centroamérica, entre los océanos Atlántico y Pacífico, y es puente entre el norte y el sur del continente. Está considerado uno de los países más peligrosos del mundo por sus altos niveles de criminalidad. En Tegucigalpa, las maras -pandillas mafiosas- ejercen su poder callejero con la violencia y son, a menudo, la opción escogida por los jóvenes ante un sistema educativo incapaz de dar respuesta a una sociedad marcada por la violencia, la corrupción y la falta de oportunidades. La escuela es gratuita pero en en realidad su acceso está limitado. Los uniformes y los materiales son obligatorios y no todas las familias pueden asumir estos costes, lo que en la práctica limita el acceso a un derecho básico.
Así se explica el papel de ACOES, que ha levantado escuelas para niñas y niños sin recursos y que gestiona, entre otras iniciativas, programas de becas y apadrinamientos de estudiantes para que niños y jóvenes puedan estudiar. Así se comprende también su lema “Aprendiendo a compartir”. Los jóvenes hondureños son la principal fuerza de ACOES. Ellos son quienes, mientras cursan sus estudios, colaboran en algún proyecto de la asociación. Muchos jóvenes de comunidades indígenas viven en las conocidas como casas “Populorum” mientras cursan sus estudios de bachillerato o universitarios y ayudan a otros niños y jóvenes. Ellos mismos se vuelcan para que las estancias de los voluntarios extranjeros sea agradable y provechosa.
En estas Populorum estarán nuestros jóvenes compartiendo este mes y medio hasta que vuelvan. En las imágenes adjuntas podemos ver la celebración del envío y la acogida en Honduras.